Síguenos
HISTORIA DE BEA: LA AVENTURA DE SEN SOK
"Lo que cuenta en la vida no es el simple hecho de haber vivido. Es qué diferencia
hemos hecho en la vida de los demás lo que determina el significado de nuestra
vida" Nelson Mandela. Con esa frase terminé mi carta de motivación para
presentarme al Programa de Continuidad Escolar 2016. He de decir que la entendí
mucho mejor tras mi estancia en Camboya.
PAILLOTE 4, SEN SOK
Aterrizamos en Phnom Penh de noche y nos sentíamos muy perdidos y
descolocados. Las primeras horas conocimos un poco de la cultura camboyana e
historia de PSE y sobretodo nos fuimos conociendo entre nosotros. Finalmente,
llegó el gran momento : saber qué camp te ha tocado. Puedo decir con seguridad
que cuando oí mi nombre en las listas de la Paillote 4, Sen Sok, lo que sentí fue
una enorme intriga sobre ese lugar desconocido a las afueras de Phnom Penh.
La Paillote de Sen Sok es lo más parecido a un oasis de colores en medio de un
barrio muy pobre y rodeado de barro y basura, ya que durante el resto del año
funciona como una guar-dería. Ésta tiene dos parques, varias clases, un pequeño
patio y mucho color. Pequeñas y originales macetas con plantas decoran el patio
principal, donde Iñaki —nuestro coordinador— pegó varios carteles con frases
motivadoras. Delante de nuestra Paillote vivían en una pintoresca casita una
decena de cabras que concurría a nuestro parque casi a diario junto con otras
familias de gallos y gallinas: el pequeño ‘zoo’ de la paillote.
Bea jugando con un niño de Sen Sok.
Bea sentada con los niños de la
paillote.
LAS MAÑANAS DEL CAMP:
“
LAS MEJORES DUCHAS”
14
monitores
form
ábamos
el
equipo
de
Sen
Sok,
7
europeos
y
7
jhemeres.
Iñaki
y
Chamrong
eran
mis
coordinadores,
ambos
debutantes
en
ese
cometido.
Muchos
—y
muy
largos—
meetings
y
conversaciones
en
la
p
ick
up
hicieron
que
forj
áramos
un equipo muy completo e integrado.
Todos
los
días
a
las
6:00
am
mi
equipo
y
yo
nos
juntábamos
en
Central
para
cargar
la
p
ick
up
con
el
desayuno
y
comida,
y
emprendíamos
un
viaje
de
unos
40
minutos
más
allá
de
suburbios
de
la
capital.
El
camino
en
la
camioneta
era
una
de
las
cosas
que
más
me
gustaban,
poder
ver
el
despertar
de
la
capital
y
a
la
gente
en su rutina, mientras el sol iba saliendo poco a poco.
La
llegada
suponía
aparcar
en
un
barrizal
y
saludar
a
las
decenas
de
niños
que
nos
esperaban
dispuestos
a
disfrutar
del
día
con
nosotros.
La
jornada
comenzaba
con
el
desayuno,
tiempo
libre
e
izada
de
bandera.
Escuchar
a
los
niños
cantar
el
himno
es
sin
duda
uno
de
los
más
bonitos
momentos
de
la
jornada
.
”
European
go
to
your
activities!
”
era
la
voz
de
Iñaki
pegado
a
su
megáfono.
Cuatro
actividades
mañaneras,
desde
manualidades,
leer
o
talleres
de
reciclaje,
hasta
balón
prisionero
o
gymnc
anas.
La
m
úsica
y
el
agua
eran
los
complementos
perfectos
para
nuestras
actividades.
Sin
duda
el
momento
más
trepidante
del
día,
eran
las
duchas.
Puedo
asegurar
que
son
las
más
peculiares
que
jamá
s
he
visto.
Mon
tábamos
una
lona
gigante
por
encima
del
parque
que
tenemos
fuera
y
lo
transformábamos
en
una
especie
de
mini-parque
acuático
por
el
cual,
por
turnos
—primero
niños
y
después
niñas—,
se
atravesaba
una
suerte
de
divertidas
estructuras
para,
al
final
del
recorrido,
previo
desvestirse, gateo y risas, bajar por el tobogán hacia un baño único.
En
este
momento,
Sen
Sok
se
convierte
en
una
verdadera
máquina.
Mientras
unos
niños
hacen
cola
para
ducharse,
otros
salen,
se
les
peina,
esperan
para
que
les
den
su
comida
y
se
sientan
con
todos
sus
compañeros
a
comer.
Al
mismo
tiempo,
los
má
s
r
ápidos
o
bien
están
repitiendo
por
tercera
vez
o
bien
están
lavando
los
platos.
Acto
seguido,
suelen
beber
agua
y
se
dirigen
a
la
clase
más
grande
para
dormir
la
siesta.
Cada
uno
de
nosotros
somos
una
pieza
del
engranaje
necesario
para
que
funcione
esta
esta
má
quina.
Organizar,
vestir
,
desvestir,
bañar,
peinar,
servir,
alimentar,
vigilar
y
cuidar
la
siesta.
Todo
ello,
siendo
la
p
aillote
m
ás
pequeña
y
el
equipo
menos
numeroso,
implica
ba
un
tremendo
esfuerzo
por
parte
de
cada
uno de nosotros al intentar que cada día todo saliera bien.
De
repente,
toda
esa
agitación
se
detenía:
¡hora
de
la
siesta!
E
ra
sin
duda,
el
intervalo
en
que
más
calor
hacía
durante
el
día;
ello,
y
un
gallo
cacareando
no
ayudaba
a
que
los
niñ
os
se
du
mieran…
pero
finalmente,
el
sueño
les
atrapaba,
hasta que los sonaban los primeros acordes de
La Vie en Rose
, ¡fin de la siesta!
Los niños y monitores de la paillote 4, Sen Sok.
OLYMPICS Y WATERPARTIES: IMPOSIBLE NO MENCIONAR
Había, semanalmente, dos días importantes: miércoles de feria y viernes de
Olympics. La feria es una “verbena” en la que todos los monitores hacen un
pequeño juego y los niños pueden pasear y elegir a qué jugar al ritmo de la
música de fondo.
Y los viernes es día de competición. Se forman seis Kroms —equipos— por
colores capitanea-dos por un monitor jhemer, que se enfrentan unos a otros en
las diferentes actividades de los monitores europeos hasta resultar, sumando
puntos, un campeón. Éste y a continuación, los demás, según el ranking en el que
hayan quedado, elegirán un regalo individual de los que, los monitores europeos,
han traído previamente desde sus países de origen. Tienen para elegir juguetes,
camisetas, chanclas, balones, libros, libretas… ¡Todos ganan!
Además, éste es también el día de reparto de arroz, el Rice Compensation —en el
que se reparte 1kg de arroz a cada niño para compensar a sus familias, al
permitiera los niños asistir al camp, en lugar de trabajar para aportar en casa—.
Ver a los niños salir, con su saco de arroz y su juguete nuevo, mientras se les
repartía la merienda-cena hacía que no pudieras dejar de sonreír…
En Sen Sok Sensok hacía muchísimo calor y nos encantaba el agua. Y de ahí la
solución para combatirlo: entre los monitores montamos una verdadera piscina en
el “Playground”. Con nuestra pesada y útil lona verde, combas, cuerdas, llantas y
bancos alzamos una pequeña charca de agua. Un globo para cada uno, niños a un
lado, y monitores al otro —¡teníamos todas las de perder!—; a la consigna de “Are
you ready???” bramada por Iñaki armado con su gramófono, daba comienzo
entonces, una mezcla entre batalla campal y la mejor fiesta del mundo, con
música, mangueras lanzando agua y sobre todo, muchas carcajadas.
TODO TIENE UN FIN
En varias ocasiones acompañamos a los niños a casa, lo cual constituyó una
experiencia única ya que tuvimos la oportunidad de adentrarnos en la vida de los
niños y ver realmente las con-diciones de su entorno. La primera vez que fui a ver
la casa de una querida familia para mí, los Rataná, volví verdaderamente
conmovida y afectada.
Una de las primeras frases que mi coordinador nos dijo, es que el camp transcurre
muy rápido, y nos lo repitió innumerables veces según se sucedían las semanas,
pero nunca te haces una verdadera idea. De repente te despiertas el último día y
vuelves a sentir un sinfín de emociones donde reina la tristeza, pero también la
satisfacción.
No puedo acabar mi relato sin dar especial gracias a cada una de las personas
que han vivido esta experiencia conmigo y se han convertido en grandes amigos,
a mis compañeros de camp, y a mis coordinadores, que nos han dirigido como
verdaderos expertos en esta aventura.
He de mencionar mencionar a un niño de cinco años de edad que hace que piense
en Sen Sok todos los días. Gracias Rat.
Y por último, gracias a todo el equipo que está detrás de PSE por la oportunidad y
por que sin ellos ese gran proyecto no saldría adelante.
*Si deseas recibir el Certificado de Donación correspondiente a la donación que has realizado, por favor, envía un correo
electrónico a socios@psncamboya.org, indicando tus datos fiscales —nombre completo, NIF y dirección postal—.
Colabora con nosotros
Asociación constituida en Madrid el 3 de noviembre de 2004.
Asociación declarada de utilidad pública e inscrita en el Registro Nacional de Asociaciones del Ministerio del Interior con el número 584 943.
© PSE Por la Sonrisa de un Niño. Todos los derechos reservados.
Síguenos
ES38 2100 3736
6622 0009 5100
Realiza una
donación a través de
nuestro IBAN*:
00068
Dona a través de
bizum, desde tu app
bancaria, selecciona
la opción de enviar
ONG e introduce el
siguiente código*